Software libre o software esclavo?
Cualquiera diría que estoy por atacar nuevamente al software privativo, pero desde mi último post a la fecha, he pasado por varias situaciones en las que pude tomar nota de cosas que sucedían en el ambiente del SL. A su vez, también disocié de linux con lecturas interesantes y cautivantes, que fueron el germinal de una idea bizarra y quizas por momentos agresiva. Pero, el mundo es construido sobre ideas, y es mi intención contribuir con mis humildes granos de arena.
Para dar mayor presición a la pregunta, la replanteo: ¿Qué fué el SL en sus principios, y en qué lo hemos convertido? Que hemos hecho con el SL?. Quizas estaría en condición de decir como el loco de la linterna, de Nietzche, que hemos matado a dios. Este texto de Nietzche fué siempre malinterpretado por algunos oportunistas, diciendo que promovía el ateísmo, pero lo que Friedrich planteó era completamente distinto. La palabra "hemos" denota responsabilidad de nuestra parte, y al decir "nuestra" estoy significando que fué el hombre el que construyó una religión que asfixió la inocente creencia que anidaba en cada ser humano.
No quiero que se interprete la idea de que estoy comparando al SL con Dios, sino que tan solo estoy haciendo un llamado a la reflexión de la comunidad de usuarios, para que se puedan reconocer como el ideal del SL se va subrepticiamente escondiendo en una suerte de religión, el cual lamentablemente lo almidona y quita libertad. Considero que el Software Libre es esclavo de sí mismo, y que su capacidad de creación de nuevas formas de expresión, tolerancia y respeto están siendo opacadas por conceptos preconcebidos que son asimilados por los nuevos miembros reclutados, que los aceptan aún sin entenderlos. Esta construcción de una religión conlleva a la deificación de personas al puesto de gurúes y por cierto, de poder. El movimiento del SL, en su estado actual, me trae a la memoria la vacía religión de Muad'Dib, el mesías de Dune. En estos momentos, el movimiento del SL adora a un Dios no vivo, con sus profetas Richard Stallman, Linus Torvalds y Eric Raymond; adora la creación de sus manos (libro de los Hechos 7,41). Muchos miembros, a pesar de proclamar la filosofia de compartir y mejorar, se ciegan a la posibilidad de pensar de manera distinta, o de aceptar ideas contrarias.
A continuación transcribiré parte de un texto, tomado de Técnicas de Control Mental, el cual detalla con sorprendente exactitud el comportamiento de muchos miembros del actual Movimiento del Software Libre. "(...) (Los individuos) Pueden ser convertidos facilmente en fanáticos que mueran y maten encantados por su sagrada causa. Es un sustituto de su fe perdida en sí mismos y se ofrecen a sí mismos como sustitutos de la esperanza individual. La Mayoría Moral está construída con verdaderos creyentes. Todos los cultos están compuestos de verdaderos creyentes. Se los puede usted encontrar en la política, la iglesia, los negocios y los grupos que trabajan por una causa social. Son los fanáticos de todas esas organizaciones.
Los movimientos de masas tienen por regla general un líder carismático. Los seguidores quieren convertir a otros a su manera de vivir o imponerles un nuevo modo de vida, si es necesario haciendo leyes que obliguen a los demás a adoptar su punto de vista, como se evidencia en las actividades de la Mayoría Moral. Esto significa forzar con armas o con castigos, en realidad esta es la base que subyace en las obligaciones legales.
La existencia de un enemigo común, un demonio, es esencial para el éxito de los movimientos de masas. Los renacentistas cristianos tenían a Satán en persona, pero eso no era suficiente: han añadido lo oculto, los pensadores de la Nueva Era y, por último, a todos los que se oponen a su mezcla de iglesia y política, como se evidencia en sus campañas políticas contra todos los que no están de acuerdo con sus opiniones. En las revoluciones, el demonio es generalmente el poder establecido o la aristocracia. Algunas empresas de potencial humano son demasiado listas para pedir a sus miembros que se afilien a ellas, etiquetándose a sí mismos de ese modo como secta, pero, si miramos detenidamente, nos damos cuenta que el demonio es todo aquel que no ha seguido su entrenamiento.
Hay movimientos de masas sin demonios, pero esos nunca llegan a mucho. Los Verdaderos Creyentes son gente mentalmente desequilibrada e insegura, o personas sin esperanza o sin amigos. Gente que no busca aliados para amar, pero si para odiar o para obsesionarse con una causa. Y los que desean una nueva vida y un nuevo orden de cosas sienten que las viejas maneras deben de ser eliminadas antes de que su nuevo orden pueda ser construído. (...)".
Cuantos de los que leyeron hasta aquí se sintieron identificados, o acaso tuvieron el recuerdo de alguien que actúa de esta forma?. En el presente texto hay varios elementos a tener en cuenta:
Quiero dejar claro que no estoy atacando al Software Libre en escencia, sino a aquello que el hombre como producto cultural construye en relación a el. Soy usuario del SL, y es por eso que adopto una posición de crítica del movimiento, a fin de despertar la conciencia de la comunidad, para que cada integrante piense por sí mismo y actúe en consecuencia.
Si alguien quiere comentar este texto, le pido que lo haga dejando la subjetividad y fanatismo a un lado. Si un movimiento no tiene la capacidad de autocrítica, se hunde en el fanatismo.
Para dar mayor presición a la pregunta, la replanteo: ¿Qué fué el SL en sus principios, y en qué lo hemos convertido? Que hemos hecho con el SL?. Quizas estaría en condición de decir como el loco de la linterna, de Nietzche, que hemos matado a dios. Este texto de Nietzche fué siempre malinterpretado por algunos oportunistas, diciendo que promovía el ateísmo, pero lo que Friedrich planteó era completamente distinto. La palabra "hemos" denota responsabilidad de nuestra parte, y al decir "nuestra" estoy significando que fué el hombre el que construyó una religión que asfixió la inocente creencia que anidaba en cada ser humano.
No quiero que se interprete la idea de que estoy comparando al SL con Dios, sino que tan solo estoy haciendo un llamado a la reflexión de la comunidad de usuarios, para que se puedan reconocer como el ideal del SL se va subrepticiamente escondiendo en una suerte de religión, el cual lamentablemente lo almidona y quita libertad. Considero que el Software Libre es esclavo de sí mismo, y que su capacidad de creación de nuevas formas de expresión, tolerancia y respeto están siendo opacadas por conceptos preconcebidos que son asimilados por los nuevos miembros reclutados, que los aceptan aún sin entenderlos. Esta construcción de una religión conlleva a la deificación de personas al puesto de gurúes y por cierto, de poder. El movimiento del SL, en su estado actual, me trae a la memoria la vacía religión de Muad'Dib, el mesías de Dune. En estos momentos, el movimiento del SL adora a un Dios no vivo, con sus profetas Richard Stallman, Linus Torvalds y Eric Raymond; adora la creación de sus manos (libro de los Hechos 7,41). Muchos miembros, a pesar de proclamar la filosofia de compartir y mejorar, se ciegan a la posibilidad de pensar de manera distinta, o de aceptar ideas contrarias.
A continuación transcribiré parte de un texto, tomado de Técnicas de Control Mental, el cual detalla con sorprendente exactitud el comportamiento de muchos miembros del actual Movimiento del Software Libre. "(...) (Los individuos) Pueden ser convertidos facilmente en fanáticos que mueran y maten encantados por su sagrada causa. Es un sustituto de su fe perdida en sí mismos y se ofrecen a sí mismos como sustitutos de la esperanza individual. La Mayoría Moral está construída con verdaderos creyentes. Todos los cultos están compuestos de verdaderos creyentes. Se los puede usted encontrar en la política, la iglesia, los negocios y los grupos que trabajan por una causa social. Son los fanáticos de todas esas organizaciones.
Los movimientos de masas tienen por regla general un líder carismático. Los seguidores quieren convertir a otros a su manera de vivir o imponerles un nuevo modo de vida, si es necesario haciendo leyes que obliguen a los demás a adoptar su punto de vista, como se evidencia en las actividades de la Mayoría Moral. Esto significa forzar con armas o con castigos, en realidad esta es la base que subyace en las obligaciones legales.
La existencia de un enemigo común, un demonio, es esencial para el éxito de los movimientos de masas. Los renacentistas cristianos tenían a Satán en persona, pero eso no era suficiente: han añadido lo oculto, los pensadores de la Nueva Era y, por último, a todos los que se oponen a su mezcla de iglesia y política, como se evidencia en sus campañas políticas contra todos los que no están de acuerdo con sus opiniones. En las revoluciones, el demonio es generalmente el poder establecido o la aristocracia. Algunas empresas de potencial humano son demasiado listas para pedir a sus miembros que se afilien a ellas, etiquetándose a sí mismos de ese modo como secta, pero, si miramos detenidamente, nos damos cuenta que el demonio es todo aquel que no ha seguido su entrenamiento.
Hay movimientos de masas sin demonios, pero esos nunca llegan a mucho. Los Verdaderos Creyentes son gente mentalmente desequilibrada e insegura, o personas sin esperanza o sin amigos. Gente que no busca aliados para amar, pero si para odiar o para obsesionarse con una causa. Y los que desean una nueva vida y un nuevo orden de cosas sienten que las viejas maneras deben de ser eliminadas antes de que su nuevo orden pueda ser construído. (...)".
Cuantos de los que leyeron hasta aquí se sintieron identificados, o acaso tuvieron el recuerdo de alguien que actúa de esta forma?. En el presente texto hay varios elementos a tener en cuenta:
- Los individuos mueren por la causa;
- han perdido su fe en sí mismos y se ofrecen a sí mismos como sustitutos de la esperanza individual, es decir, han dejado de ser individuos para transformarse en masa;
- Estos movimientos tienen un lider carismático, como lo es Richard Stallman;
- los miembros de estas organizaciones quieren imponer su estilo de vida a los otros, con presiones, humillaciones, castigos, generando leyes que obliguen al resto a abrazar su punto de vista, o incluso recurriendo a la fuerza. Esto puede darse incluso dentro del mismo movimiento del SL, cuando algunos grupos mas extremistas lanzan verdaderas cacerías de brujas al perseguir a usuarios mas moderados por preferir por ejemplo, distribuciones de linux mas simples o estables, en vez de otras mas optimizadas y elitistas;
- y quizas, el aspecto mas evidente es la existencia de un enemigo común, como lo es EEUU para el Islam, o quizas el diablo para el cristianísmo. En este caso, se demoniza la figura de Bill Gates y su empresa Microsoft.
Quiero dejar claro que no estoy atacando al Software Libre en escencia, sino a aquello que el hombre como producto cultural construye en relación a el. Soy usuario del SL, y es por eso que adopto una posición de crítica del movimiento, a fin de despertar la conciencia de la comunidad, para que cada integrante piense por sí mismo y actúe en consecuencia.
Si alguien quiere comentar este texto, le pido que lo haga dejando la subjetividad y fanatismo a un lado. Si un movimiento no tiene la capacidad de autocrítica, se hunde en el fanatismo.